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Conflicto Ambiental en Pilar: Vecinos Denuncian a Pacific SRL por Daños al Arroyo Toro

La construcción clandestina en el arroyo Toro, obstruido por Pacific SRL, reveló una problemática mucho más profunda que denuncian los vecinos y en la que autoridades y expertos no hacen mucho enfoque. Las consecuencias, los avances y los retrocesos, serán abordados en esta nota de PDI.

por Sofia Bonanno y Corina Chimenti

A fines de 2023 el arroyo Toro, que pasa por el vecindario Los Tambos, fue obstruido por la empresa Pacific SRL con el fin de comenzar a construir un barrio cerrado. Tras este suceso, los vecinos comenzaron a tomar medidas legales las cuales fueron ignoradas por las autoridades.

Los arroyos son ecosistemas esenciales que brindan múltiples beneficios a las comunidades que los rodean. En un barrio donde habitan personas y animales, el cuidado y mantenimiento del curso de un arroyo es crucial para garantizar un ambiente saludable y sostenible. Con la mantención del curso de agua las sociedades se benefician de una fuente de agua limpia y potable para el uso de los habitantes y así también un ecosistema positivo para los animales que habitan la zona. 

Además, un arroyo es un espacio recreativo para los residentes del barrio, con espacios verdes para el disfrute familiar y el contacto con la naturaleza.

En 2011, se fundó la Sociedad de Fomento "Los Tambos" en Pilar, un grupo de vecinos dedicados a mejorar la calidad de vida en su barrio y a proteger su comunidad cumpliendo con las leyes municipales. Desde entonces, los habitantes han sufrido varias situaciones de injusticia y de falta de infraestructura necesaria para una vida adecuada. Desde el corte de recursos básicos como la luz y el agua por varios días hasta el peligro que genera la falta de una parada para el colectivo, los residentes se han quejado de innumerables problemas que ocurrieron en la zona.

En 2023, la organización alzó su voz contra Pacific SRL, una empresa de desarrollos inmobiliarios acusada de tapar un segmento del arroyo Toro para la construcción de un condominio, lo cual, pone en riesgo a la comunidad que ya enfrenta problemas ambientales. Luego de las fuertes lluvias producidas en los últimos meses, esta situación se agravó aún más generando inundaciones en las calles que dejaron a los vecinos en sus casas por días, impidiendoles ir al trabajo y a los niños a la escuela.

A pesar de la clausura de la obra por parte del municipio, los residentes reportaron en más de una oportunidad que la construcción ha continuado de manera clandestina, con actividades como el ingreso de camiones con materiales, maquinaria para construir y creando daños en la infraestructura de la zona, como la rotura de cañerías.

"Pero nosotros siempre buscamos la manera de vivir mejor, dignamente, que es lo que estamos solicitando" declara una de las vecinas afectadas, quien decidió mantener el anonimato como la mayoría de los entrevistados. Mencionan cómo antes del tapado del arroyo el desagüe del agua era más rápido y las actividades cotidianas no se veían comprometidas como lo están actualmente. El trabajo agrícola que se desarrolla en el barrio se ve alterado, como menciona una de las vecinas: "la producción del tomate, producción de frutilla, producción de hojas, lechuga, acelga, todo lo que es eso en la quinta, lo que se inunda no lo volvés a recuperar, lo mata. Todo lo que se inundó, lo mató".

No solo las personas se ven perjudicadas por esta situación sino que los animales también. Adriana Monachesi, dueña de la ONG "Santuario Jaulas Vacías" y habitante del barrio, remarca cómo las alteraciones del ecosistema e infraestructura de la zona influyen en la flora y fauna. "El deterioro de la propiedad fue importante" sentencia.

La ingeniera ambiental Catalina Galliano y el licenciado en Información Ambiental Santiago Herrera, brindaron declaraciones sobre el tapado del arroyo y la construcción a sus alrededores sin un estudio de impacto ambiental que la soporte. "La empresa debe presentar ante la municipalidad o ante la provincia según cual sea la jurisdicción un estudio de impacto ambiental, que está marcado en la Ley 11723. Y sin la aprobación de este estudio no se puede empezar a construir", explican ambos profesionales. Por su parte Patricia, la representante legal y miembro del barrio, expone la falta de la presentación de dicho estudio por parte de la desarrolladora inmobiliaria.

En cuanto al marco legal, se aplican leyes tanto municipales como provinciales que reflejan la importancia de proteger los recursos hídricos y la necesidad de una gestión responsable y autorizase de las obras de construcción para evitar graves impactos ambientales y sociales. Uno de los códigos que se ven incumplidos en este panorama es el "3.4.1 Obligación de construir y conservar cercas y aceras." que determina que todo propietario de terreno baldío o edificado con frente a la vía pública en el cual la Municipalidad pueda dar línea y nivel definitivo está obligado a construir y conservar en su frente la cerca y la acera de acuerdo con este código.

A pesar de precisar una serie de pasos legales a cumplir para tener la habilitación y poder comenzar a construir, la desarrolladora ha hecho varias publicaciones de venta de lotes para el nuevo barrio "Luz del Pilar". Lara de Luca, estudiante avanzada de abogacía, remarca cómo esto podría categorizarse como un "delito ambiental" porque vender lotes en un terreno que no es apto para la construcción puede producir graves consecuencias a largo plazo. En este caso, las fuertes lluvias y la falta de zanjeo para el desagüe del agua producen inundaciones de gran magnitud que afectan no solo la movilidad dentro del barrio sino que también a los servicios básicos. Los cortes de luz, agua y gas son otra problemática con la que los habitantes se enfrentan y no presentan condiciones óptimas para la compra de nuevas viviendas con la promesa de un barrio del futuro con infraestructura moderna.

Si bien se han presentado innumerables quejas y denuncias por parte de los vecinos, la única respuesta que obtuvieron en una instancia fue un bloqueo de Whatsapp. La Municipalidad y varios sectores de control se negaron a dar testimonios o el espacio para aclarar la situación. Los vecinos siguen insistiendo y están a la espera de una solución.